Con la democratización del lujo, los clientes buscan una vuelta a la exclusividad, a ser únicos a través de la personalización del producto y la experiencia de crear sus propias piezas. Así consiguen artículos creados por ellos y para ellos, llegando incluso a pagar el doble de su precio original, sólo para conseguir la customización total del producto.
Aunque se trate de una tendencia que está en boga, la individualización de los productos se inició hace tiempo en las casas de las firmas de lujo. Bottega Veneta hizo suyo el lema “Cuando sus propias iniciales son suficientes”, firma que graba en productos de piel. Cartier, en su tienda de Rue de la Paix, pone a disposición del cliente una “nariz” que diseña y crea una esencia única para él por un precio de 60.000€.
La digitalización ha conseguido que el proceso de customización sea mucho más fácil, rápido y ambicioso. La firma Goyard, en su web, ya contempla una sección sólo de personalización, también Bottega Veneta, a través de su proyecto Initials sigue ofreciendo el bordado de iniciales Así como muchas otras: Louis Vuitton, Gucci (con customizaciones en oro), pero una de las que más llama la atención es la apuesta de la firma Loewe, permitiendo diseñar casi a medida, en 8 pasos, su mítico “Amazona”, sólo hay que esperar 14 semanas y pagar un precio que oscila entre los 1.700€ y 25.000€, dependiendo de los materiales y tamaño escogidos.
Perfumes, complementos y también zapatos o joyas. Así, la firma Jokers Closet, “juega” a personalizar el calzado con 6 modelos diferentes, eligiendo hasta el color de los cordones. O la firma Tiffany&Co a través de su universo “Charme” permite crear pulseras o collares con diferentes piezas o engarces.
Y ahora esta tendencia llega al mundo de la alta costura. Así nace la nueva web Tinker Tailor. La co-fundadora de Moda Operandi, Aslaug Magnusdottir, lanzará un site para customizar prendas de firmas internacionales como Marchesa, Alberta Ferretti o Giambattista Valli. Contará con más de 50 marcas y permitirá que el cliente modifique ciertos aspectos del diseño tales como color, tejido, o algunos adornos. Consiste en introducir avances, que ya existen en la gran distribución, al mundo del lujo. Según Magnusdottir, esta aplicación es “El Nike ID de la moda de lujo” y “será una revolución” (Entrevista en The Wall Street Journal). Los precios irán desde los 200$ por un top hasta los 20.000$.
La personalización permite adaptar el producto a los gustos y necesidades del cliente. Consigue hacerles sentir únicos y especiales. Esta tendencia se refuerza en las marcas de lujo que pretenden imprimir una diferencia hacia lo verdaderamente exclusivo. La customización online, ofrece un mayor abanico de posibilidades, que el proceso pueda llevarse a cabo en cualquier punto del mundo, sin necesidad de que la firma tenga una tienda física, así como acortar los tiempos de entrega. Todo ello otorga a la marca un gran valor añadido, ese intangible por el que las marcas de lujo se distinguen.
Lucía Soriano para Luxurycomm