Seguro que eres una de esas a las que les resulta cada vez más difícil ir de compras: estrés, falta de tiempo, y ¿para qué?, si tengo todo en Internet… Pues te interesa este post porque hoy os hablaremos de una de las razones para seguir haciéndolo: la digitalización del retail en el sector del lujo, o cómo el punto de venta se convierte en un lugar de experiencia de la marca.
Los consumidores cada vez somos más digitales, tanto es así que en el último años el gasto online en artículos de lujo creció un 31%. Este cambio en el comportamiento de compra requiere una modificación en la estrategia de marca pero sobretodo ofrece grandes oportunidades y los puntos de venta son la clave.
Pero ¿quién ha dicho que lo digital y presencial no pueden ir de la mano? La función principal de las tiendas de lujo está evolucionando más allá de dar servicio para conseguir una venta; se están convirtiendo en el espacio perfecto para contar el story telling de la marca, a través de experiencias digitales presenciales exclusivas que cautivan visualmente y que permiten “jugar” con los productos de la marca, siempre manteniendo la sensación de lujo.
Ya hay diferentes marcas que lo están implantando. Y cómo no, Burberry es una de ellas. Su tienda insignia de Londres, en Regent Street, aúna el mundo digital con el punto de venta más tradicional. Así puedes encontrar ipads con tu histórico de compras que permite un asesoramiento mucho más personalizado, pantallas gigantes donde se proyectan las colecciones, espejos interactivos… quizá lo más novedoso es un chip de identificación por radiofrecuencia (RFID): se trata de una tecnología integrada en algunos modelos, que, cuando se acerca a una pantalla o en el probador, permite visualizar contenido multimedia específico del producto, como información de cómo se ha confeccionado o las telas utilizadas.
Audi es otra marca de lujo a la cabeza de estas implantaciones digitales. Su sala de exposición en la exclusiva zona de Mayfair de Londres es impresionante. El objetivo: personalizar el Audio de tus sueños con tablets multi-touch que permiten a los visitantes experimentar con diferentes colores, opciones de equipamiento y detalles técnicos (hasta 3,5 millones de combinaciones, dicen). Eso lo hago desde casa, pensaréis, sí, pero en Mayfair,el Audi que se personaliza se muestra en una gran pantalla de alta definición, lo que te permite “conducir” a través de diferentes lugares, incluso escuchar el ruido del motor del coche.
Otro ejemplo lo encontramos en la flagship de Gucci en Milán. Cinco columnas de alta resolución que reproducen imágenes de los desfiles, con las que el cliente puede interactuar, transformando así la tienda Monte Napoleone en una de las boutiques más tecnológicamente avanzadas en el sector del lujo.
El comercio electrónico sigue creciendo de manera imparable, por ello las marcas de lujo tienen que dar nuevos motivos a sus clientes para que visiten sus puntos de venta, generando experiencias únicas que el usuario pueda disfrutar y compartir. Un escaparate único de la identidad de marca de lujo creará nuevos embajadores de la firma, estableciendo relaciones más significativas con sus clientes más valiosos.